Cine
El cine sobrevivirá a la pandemia del coronavirus COVID-19
Se que muchos están hartos de abrir sus redes sociales para encontrarse con algo relacionado a el Coronavirus. Sin embargo, siento que este tema es bastante interesante ya que he leído demasiados artículos de cómo la gente piensa que el cine no va a ser el mismo después de que esta pandemia termine y ya que no tengo nada mejor que hacer, decidí hacer una investigación de este tema.
1: ¿El fin de las salas de cine?
Lo primero que hice fue buscar artículos relacionados con todo lo que está pasando. Me sorprendió encontrar varios resultados con títulos bastante llamativos. Estos mencionan como el cine presencial básicamente va a terminar. Bastante extremista a mi parecer.
Considero que para contestar esta pregunta hay que mencionar otras situaciones similares en el pasado. Aunque no lo crean, muchas veces el cine convencional ha sido amenazado con desaparecer. Un claro ejemplo es la pandemia de gripe de 1918, también conocida como la gripe española. Esta pandemia tomó la vida de 50 millones de personas alrededor del mundo. De hecho, al igual que ahora, los cines tuvieron que ser cerrados con el miedo de no volver a ser como ante. Sin embargo, la decisión de cerrar los cines en ese momento fue bastante controversial.
El gobierno Británico veía a la industria cinematográfica como un perfecto distractor para el público ya que la primera guerra mundial estaba sucediendo en ese año. Inclusive, este era utilizado a modo de propaganda.
Por esta razón, no todos los cines en el Reino Unido fueron cerrados. Solo se tomaron unas medidas mínimas como la ventilación de las salas durante 30 minutos cada 3 horas o la prohibición de niños.
Existen muchas cartas a la prensa comercial de los directores de cine en 1918 que dicen que el cierre de cine debido a la gripe no tenían el más mínimo sentido. Estas cartas pueden ser bastante similares con como muchos piensan actualmente.
Del mismo modo, en Estados Unidos, el cierre de cines tuvo un gran impacto a nivel regional. Hablando específicamente de Los Ángeles, las casas productoras tuvieron que detener nuevos lanzamientos y Hollywood tuvo que dejar de hacer películas en ese periodo.
Ahora, muchos pueden pensar que por lo ya mencionado, la industria del cine estadounidense tuvo muchos cambios negativos, sin embargo fue todo lo contrario. De hecho, la industria floreció notablemente. Justo como el guionista Richard Brody menciona en un artículo para The New York Times “Muchas empresas más pequeñas cerraron, y la reestructuración resultante condujo a una consolidación que hizo que las grandes empresas crecieran, creando los estudios que se convirtieron en maestros de producción, distribución y exhibición juntos; la gripe, combinada con el final de la guerra, dio lugar al mega Hollywood que se está duplicando nuevamente hoy “.
Con este cambio organizacional las audiencias aumentaron. La asistencia en la década de 1930 fue mayor que en cualquier otra década anterior. Después de la Gran depresión de 1929, las películas jugaron un papel bastante importante en mantener a la gente entretenida. La segunda guerra mundial, donde varios países vieron al cine como una forma de propaganda, también fue un momento de prosperidad para esta industria.
2: La televisión vs el cine
Considero que mirar cómo el cine sobrevivió momentos turbulentos antes de que la televisión se hiciera conocida no es muy justo. A partir de la década de los 50 el cine no tenía el monopolio del entretenimiento audiovisual. Inclusive, los gobiernos podrían utilizar a la televisión como herramienta de propaganda sin que la gente tenga que salir de su hogar.
Este nuevo medio, era lo que todos querían tener, sobre todo porque cuando inició, su contenido era totalmente gratuito y con el tiempo todo el mundo se enamoraba mas y mas de la pantalla chica.
En Gran Bretaña y Estados Unidos después de 1946 la audiencia de el séptimo arte fue disminuyendo año tras año. La gente, también fue considerando al cine como un espacio moralmente contaminado, mientras que por otro lado, la televisión era más segura. Es así, como la llegada de la pantalla chica era para muchos una posible muerte para el cine comercial y también la parte más artística de este.
Sin embargo, como sabemos actualmente, el cine no estaba para nadar cerca de terminar. Lo más interesante es que en vez de acabar, este logro revitalizarse. En la década de los 70s, los Blockbusters de verano terminaron siendo una gran ayuda para aumentar audiencias. Esto fue desde Jaws (1975) de Steven Spielberg en adelante, los lanzamientos generales con marketing masivo se hicieron cada vez más frecuentes.
Con la llegada de los 80s llegó otro desafío aún más directo para las salas de cine específicamente. Las cintas de cassette VHS. Estas hicieron que las películas pudieran ser vistas desde casa. Las salas de cine ya no eran la única opción para el público. Es así como la industria en vez de decaer por completo se hizo mucho más fuerte. Aunque Tarantino calificó la década de los 80s como la peor para el cine estadounidense, las productoras pensaban todo lo contrario, estas habían encontrado una nueva fuente de ingreso. La industria se recuperó.
3: La llegada de Netflix
Cuando todos pensábamos que el cine no iba a tener más competencias llega un nuevo contendiente. Las plataformas de Streaming. En los últimos años, Netflix y Amazon han demostrado dar varios golpes ya que aparte de ofrecer acceso a miles de películas desde la comodidad del hogar, también han producido contenido original cada vez mas y mas costoso.
Agregando más peligro para los cines, Netflix ha logrado conseguir directores de renombre como Martin Scorsese y Noah Baumbach para que trabajen con ellos. Logrando incluso conseguir varias nominaciones en premiaciones importantes.
Mucho antes de la pandemia, ya había indicios de que la cultura de ir a las salas de cine estaba en riesgo. Si, las cifras generales en taquilla subieron durante el 2019, sin embargo pocas productoras son las que han ganado ganancias significantes, siendo Disney el ejemplo más notorio. Este estudio ganó alrededor de 11 billones de dólares en taquilla durante el año pasado, pero los estudios independientes han estado luchando por sobrevivir. Peor aún, los estudios grandes con el fin de monopolizar el mercado auxiliar han sacado sus propias plataformas de Streaming. Todo esto desfavorece notablemente a las casas productoras independientes.
4: 2020
Así es como llegamos a el mítico año 2020. Con el descubrimiento del coronavirus, la batalla entre el cine tradicional y las plataformas de Streaming es cada vez más interesante. De hecho, hace un tiempo se anunció como Netflix superó a Disney en valor de mercado. La plataforma logró alcanzar y superar a la productora con más ganancias del año pasado.
Miles de cines han cerrado alrededor del mundo con la promesa de volver a abrir, pero ¿Es esto cierto? Las producciones han parado, los festivales han sido cancelados, los estrenos atrasados, e incluso las premiaciones se están comenzando a posponer. Esto sin duda es una situación bastante difícil que nos hace dudar del futuro de esta industria.
Sin embargo, gracias a las diferentes crisis que sufrió el cine tradicional a lo largo de los años, considero que es bastante difícil que este termine. Es más, aquí en México ya se encuentran algunos cines abiertos. Claro, que en mi punto de vista es un momento algo apresurado para tomar la decisión de abrirlos, pero esta decisión demuestra cómo la gente está desesperada para salir y volver a tener modos de entretenimiento que tanto extrañan. Conclusión
En conclusión, la historia sugiere que el cine va a adaptarse y sobrevivir. Después de todas las crisis que he mencionado, el público en general se vió mucho más interesado en la experiencia que ofrecen las salas de cine. Demostrando que un formato casero no puede reemplazar a la pantalla grande.
Incluso me atrevo a decir que los consumidores y las distribuidoras van a estar más abiertos para traer/ver películas extranjeras gracias al éxito que tuvo Parasite el año pasado. El futuro de la industria cinematográfica se ve bastante prometedora.