Reseñas
Licorice Pizza, el significado del amor para los jóvenes adultos

La inspiración puede llegar de los lugares más inesperados, al menos así fue para Paul Thomas Anderson, quien por el año 2001, se encontraba paseando por una secundaria en Los Ángeles en el día de la foto escolar, en el que pudo observar como una estudiante regañaba a uno de los fotógrafos. Poco después, la inspiración de Anderson aumentó con las experiencias de su amigo Gary Goetzman, quien fue un actor infantil en diversos programas y película y tiempo después fundó una empresa de camas de agua y un arcade de pinball.
Todo esto llevo a que en noviembre de 2020, Paul Thomas Anderson cambiara el nombre de esta historia que fue construyendo de Soggy Bottom a Licorice Pizza, ya que, ambos términos le recordaban a Anderson su niñez y esos momentos en los que solo corría sin preocupación alguna. Actualmente, Licorice Pizza se encuentra disponible en cines y es una obra más ligera e íntima a lo que ya se tiene acostumbrado de la filmografía de Paul Thomas Anderson.
En el año de 1973, dos jóvenes, Alana Kane (Alana Haim) y Gary Valentine (Cooper Hoffman), se conocen en la secundaria mientras se lleva a cabo el día de la foto en la escuela y a partir de ahí, irán experimentando diversas situaciones en las que se pondrá a prueba su perspectiva sobre el amor, la madurez y la juventud, todo esto en el Valle de San Fernando, California.
Como bien se explicó anteriormente, la película fue concebida a través de experiencias y de coincidencias, permitiendo que Licorice Pizza se vuelva un largometraje íntimo desde sus primeros minutos, pues se puede observar un diseño de producción, así como una trama cuyo contexto está bien definido y es relevante para el desarrollo de la misma, logrando que la experiencia en cines, y en general, sea gratificante, pues se nota el empeño de crear un mundo que refleje la perspectiva de la juventud que sea fácil de identificar en la actualidad.
Esto también se debe al gran elenco con el que cuenta Paul Thomas Anderson, pues las elecciones de los primerizos Alana Haim y de Cooper Hoffman fueron las correctas, debido a que ambos crean una química convincente y entrañable que le da al filme una sensación de dinamismo, opacando, incluso, al resto del elenco que integra Licorice Pizza, que no es poca cosa, pues cuenta con Bradley Cooper, Sean Penn, Benny Safdie, Maya Rudolph, entre otros, por lo que la conexión entre Alana y Cooper es aún más admirable.
Paul Thomas Anderson no solo es capaz de sacarle el máximo provecho a las actuaciones de su elenco, sino que sabe como aprovechar el contexto y el entorno de sus historias, siendo Licorice Pizza la que más se ha sentido personal dentro de su filmografía, pues tanto el trabajo en fotografía, como en el diseño de producción, le da ese toque de intimidad a la película, debido a la trama construida a partir de experiencias propias de Anderson y de sus amigos, reafirmando el hecho de que Paul Thomas Anderson es un director que sabe darle amplitud a las tramas principales de sus largometrajes.
Sin embargo, lo que hace enriquecedora la experiencia de Licorice Pizza es la premisa de la misma, pues tenemos a dos personajes que se encuentran en un proceso de aprendizaje en sus respectivas vidas. Por un lado, tenemos a Alana, quien intenta buscar su camino propio y entender lo que implica la madurez emocional; por otro lado, Gary trata de comprender el significado del primer amor y a su vez, aprovechar el éxtasis de su juventud, haciendo que ambos personajes crezcan como personas conforme avanza la película y permitiendo que el espectador se pueda identificar con ellos.
Licorice Pizza es el perfecto ejemplo de que las coincidencias pueden llevar a algo hermoso, pues Paul Thomas Anderson a partir de vivencias y relatos de sus allegados, pudo construir una película que se caracterice por ser entrañable, entretenida, íntima y reflexiva, gracias a un estupendo elenco comprometido, el trabajo realizado en la producción y su trama única, logrando demostrar que tiene más que merecido ser reconocida por el American Film Institute como una de las mejores películas del 2021.
Avance subtitulado en español de Licorice Pizza
