Malentendido de Instagram causa éxodo de usuarios

Hace un par de días comenzó la polémica por cambios en la política de privacidad de la empresa que recientemente fue comprada por Facebook.

Para empezar, ¿se han dado cuenta que siempre que instalan una app en sus dispositivos móviles aparece un “acuerdo de uso” al que prácticamente todos le dan “Aceptar” sin siquiera leerlo? Pues en muchos de estos casos nos están avisando de que la app tendrá acceso total a nuestro equipo, el internet y a la transferencia de archivos. En el caso de Instagram, Facebook decidió ir un paso más lejos con el objetivo de comercializar la App. Kevin Systrom, fundador de Instagram, ha afirmado que la aplicación siempre tuvo el objetivo de ser lucrativa de algún modo para ser autosustentable.

El nuevo acuerdo, se prestaba a malinterpretaciones, pues en el afán de colocar publicidad en la imagen o utilizarla con fines publicitarios de la app se malinterpretó pensando que Instagram vendería las fotos de los usuarios. La única manera de que los usuarios pudieran escapar a esto era dando de baja sus cuentas, pero antes del 16 de enero. Porque después del 16 de enero, tus fotos pertenecerían a perpetuidad a Facebook, para que les dé el uso que considere viable.

Actores, cineastas y estrellas de plástico (esas que no tienen talento, pero por alguna razón son populares con cierto sector de la sociedad… cof Kardashian cof…) de inmediato se retiraron de la aplicación y lamentaban la situación. Esta “revuelta digital” hizo que Systrom emitiera un comunicado informando del “malentendido” y de que el acuerdo legal será corregido para evitar confusiones.

Somos el producto a la venta

Muchos no se han dado cuenta aún. Y piensan que utilizar algo en internet, subir una fotografía o descargar una película es su derecho y que no se debe pagar por esto. Bueno, están equivocados. En el momento que tu subes algo, lo que sea, a la red. En ese instante deja de pertenecerte y es del dominio público. Cualquiera lo puede utilizar para ilustrar un trabajo, imprimirlo y recortarlo, retocarlo, alterarlo o lo que sea. Así que tengan mucho cuidado con lo que comparten en internet.

Nuestro tráfico lo es todo. Las grandes compañías lo saben y dependen de nuestra presencia en sus redes para obtener ganancias.

Por un momento, los usuarios hicieron temblar a Instagram y Facebook. Si no estamos de acuerdo, podemos irnos y ellos son los que pierden. Así que exijan sus derechos, pero tengan en cuenta que ninguno de ellos vive de buenas acciones…