Sully: Hazaña en el Hudson triunfa gracias a un olvidado Tom Hanks

Es fácil equivocarse con Sully y pensar que es una simple película heróica que busca perseguir un Óscar el próximo año. ¿Y porqué no pensar así? El galardonado Tom Hanks interpreta al Capitán Chesley Sullenberger, el héroe piloto que logró aterrizar su avión averiado en las congeladas aguas del río Hudson en Nueva York el 15 de enero del 2009, salvando de esta manera 150 pasajeros y cinco miembros de la tripulación. Sin embargo, a estas alturas ya deberíamos saber que Clint Eastwood usualmente no dirige ese tipo de películas basadas en una formula, a pesar de que sus películas son muy buenas.

Sully se gana tu atención y respeto al cavar profundo, al encontrar el miedo y las dudas internas de  un hombre que nunca acepta que se le defina como héroe. Te abre los ojos.

Estos son los hechos: Aproximadamente 3 minutos después de que el vuelo 1549 de US Airways despegó del aeropuerto LaGuardia de Nueva York múltiples golpes de aves (gansos canadienses) causaron la falla de las dos turbinas. Sully y su co piloto Jeffrey Skiles (Aaron Eckhart) consideraron sus opciones. ¿Podrían regresar o intentarían llegar al aeropuerto cercano de Teterboro en Nueva Jersey arriesgándose a chocar? Con sólo 208 segundos para tomar la decisión, Sully dijo “Vamos hacia el Hudson.” El Capitán escogió un lugar cerca de la ciudad en dónde helicópteros, policía, bomberos y unidades de rescate podrían moverse con rapidez. Así lo hicieron, en tan sólo 24 minutos.

Eastwood, utilizando cámaras IMAX (una excelente decisión de su cinematógrafo Tom Stern), te pone en la orilla de la butaca con escenas de alta tensión de vuelo y de rescate. ¿Pero podrían esas secuencias por más emocionantes que sean, sostener una película completa? Definitivamente no. El caso es muy similar a la película de El Vuelo (2012) protagonizada por Denzel Washington en la que un piloto logra salvar a la mayoría de sus pasajeros, pero las compañías buscan a un culpable del accidente y sufre una terrible persecución.  Es por esta razón que Clint Eastwood tanto como su guionista Todd Komarnicki se enfocan mucho en las consecuencias del llamado “Milagro del Hudson.” En público, Sully es acosado por los medios, políticos y fanáticos. En privado lo acechan visiones de lo que pudo haber ocurrido si hubiera fallado en encontrar un lugar donde aterrizar. Mientras habla por teléfono con su esposa Lorrie (Laura Linney), el piloto recibe la confianza de que tomó la mejor decisión. Pero sus acciones, basadas en 40 años de experiencia, son cuestionadas por la Junta de Seguridad Nacional de Transporte (NTSB por sus siglas en inglés) que atormentan a Sully y a su co piloto sin descanso. En la vida real, las audiencias de la NTSB no sucedieron después del evento, sino 18 meses después.

Sully es claramente una película personal para Eastwood y Hanks, ambos en la cima de su carrera. Es una gran interpretación, matizada y en perfecta sintonía a la cualidades de un hombre modesto de habilidades impresionantes. Hanks ha ganado dos premios Óscar como mejor actor en Philadelphia (1993) y Forrest Gump (1994), y fue nominado por Big (1988), Saving Private Ryan (1998) y Cast Away (2000). Parece increíble pero su último reconocimiento fue hace 15 años. ¿Que pasa con la vida, a dónde se ha ido? ¿Será que la Academia esta tomando a Hanks como algo seguro al punto de no valorar más su trabajo? El tipo ha logrado excelentes niveles histriónicos en cintas como Road to Perdition (2002), Captain Phillips (2013) y Bridge of Spies (2015). Justo como su personaje, Hanks hace que lo imposible parezca sencillo y aún así gracias a que es un maestro de lo sutil, nos deja ver lo que necesitamos para definir su personaje, creando una clara y completa impresión. Esta en su mejor nivel. Esta es una cinta que se merece las cuatro palabras que Sully más admira: Un Trabajo bien hecho. (Job Well Done).

Avance subtitulado de Sully: Hazaña en el Hudson