Reseñas
El Caballero Verde le dejará algo diferente a cada persona
El director David Lowery se encontraba montando un diorama de personajes de WILLOW en su patio cuando se le ocurrió que sería buena idea realizar una adaptación cinematográfica del poema Arturiano del siglo 14 sobre THE GREEN KNIGHT (El Caballero Verde) y Sir Gawain, un texto que hasta la fecha es discutido por expertos en el tema sobre sus diferentes interpretaciones.
Esto es lo primero que debes tener en mente cuando te preparas para ver El Caballero Verde. Se trata de la adaptación de un poema y como tal, esta sujeto a múltiples interpretaciones.
La historia no podría ser más simple ni más desconcertante: un noble en la corte del Rey Arturo es desafiado por un extraño caballero a una competencia marcial en el día de Navidad. Pero la contienda niega o deconstruye por completo la idea del valor, la fuerza, el coraje o la habilidad varonil en la batalla. Todo lo que se requiere es sumisión.
En esta adaptación cinematográfica, Dev Patel interpreta a Gawain, a quien Lowery imagina casi como una especie de Príncipe playboy, un libertino que despierta en algún lugar de mala reputación cuando su amante, Essel (Alicia Vikander) le arroja una jarra de cerveza en la cara mientras grita “¡Cristo ha nacido!”. Es el día de Navidad, y Gawain debe asistir a la corte presidida por los reyes. Aunque estos nunca son mencionados por nombre, es claro que se trata del Rey Arturo y la Reina Ginebra interpretados de manera carismática por Sean Harris (Mission: Impossible – Rogue Nation) y Kate Dickie (The Witch) respectivamente.
El rey le pide a su sobrino Gawain que le cuente una historia suya para conocerlo mejor, el noble responde casi avergonzado que no tiene ninguna, reconociendo una necesidad de perpetuar su legado al encontrarse entre tantas leyendas vivientes de la mesa redonda. Cuando Arturo le pide a sus caballeros algún cuento para divertir a la compañía, en respuesta aparece por la puerta principal, un gigantesco extraño, un caballero vestido de verde, suplicando al rey que le permita enfrentarse contra alguno de sus asistentes en un “juego navideño”.
El extraño ofrece un trato. Desafía a cualquiera de los presentes a golpearlo. Si pueden hacerlo, el contendiente obtendrá su imponente arma a cambio. Pero hay un costo. Dentro de un año, quien haya aceptado jugar debe acudir a la Capilla Verde, donde el Caballero Verde devolverá el golpe con la misma intensidad. Motivado por la necesidad de tener sus propias historias que contar, Gawain da un paso adelante y, a pesar de que Arturo le recuerda que sólo se trata de un juego, el impetuoso joven decapita al Caballero Verde. La mítica criatura levanta la cabeza, que no parece demasiado preocupada por su desprendimiento, dice “Un año”, y se ríe mientras se aleja cabalagando. Ese año pasará demasiado rápido para Gawain…
Este es realmente el prólogo de El Caballero Verde, el resto de la película consiste en el viaje físico y psicológico de Gawain para encontrarse con su destino. En el camino, se encuentra con un carroñero interpretado por Barry Keoghan, una misteriosa joven interpretada por Erin Kellyman y un Lord interpretado por Joel Edgerton. El viaje de Gawain se convierte en una espiral, sintiéndose cada vez más como un sueño, como si nunca hubiera abandonado ese banquete con el Caballero Verde para empezar, y la película gana impulso a través de una sensación acumulativa de desorientación. No se convierte tanto en una historia de un viaje físico sino en uno mental y emocional, una serie de desafíos ilustrados majestuosamente por la fotografía de Andrew Droz Palermo, acompañados por inquietantes arreglos musicales de Daniel Hart.
Si bien puede ser su película más ambiciosa, David Lowery ha jugado con temas complejos antes en proyectos como “A Ghost Story” protagonizada por Casey Affleck y Rooney Mara, y ambas reflejan el cuestionamiento de la existencia humana. El Caballero Verde trata sobre muchas cosas, desde la Madre Naturaleza hasta la búsqueda del valor y la audiencia se irá con lecturas muy diferentes de la película. La decisión más acertada de Lowery es no mencionar a Arturo, Ginebra, los caballeros, Excalibur y hasta Merlín por nombre. Nos deja descubrir esos pequeños secretos a los que conocemos un poco de la leyenda al tiempo que evita que el peso histórico de esos personajes roben la atención de un hombre que se niega a llamarse a sí mismo “caballero”. Gawain aprenderá a valorar si vivir sin honor vale la pena o pagar una deuda con tu vida al final es más reconfortante.
“El caballero verde” pide mucho de sus espectadores: al igual que Gawain, estamos siendo probados, para mantenernos comprometidos con lo que podría llamarse un ritmo lento pero envolvente. La brillantez visual de esta película se combina con una toxicidad abrumadora. Al final, estamos todos sentados en la mesa redonda durante ese banquete, escuchando la historia solicitada por el Rey Arturo, contada por un increíble narrador.
El Caballero Verde está disponible en Amazon Prime Video
Avance subtitulado de El Caballero Verde