Reseñas
La Chica del tren evita descarrilarse gracias a Emily Blunt
Al sumergirte en la adaptación cinematográfica del bestseller de misterio escrito por Paula Hawkins, The Girl on the Train (La Chica del Tren), lo primero que notas es la ausencia de Inglaterra. Así es, Hollywood ha remplazado ese tren que recorría la neblina de Londres, desde dónde cierta chica cree que atestigua sexo, violencia y tal vez un asesinato por un expreso de Westchester entrando y saliendo de la Gran Estación Central de Manhattan. Simplemente no es lo mismo.
Afortunadamente el director Tate Taylor (The Help) trabaja a partir de un intrigante y oscuro guión de Erin Creesida Wilson (Secretary), y realizó la mejor selección posible para interpretar a Rachel Watson, la alcohólica de ojos nublados que es un completo desastre emocional. Si, estamos hablando de Emily Blunt y es perfecta al darle vida a esta ebria inconsciente con un bienvenido toque de empatía.
Blunt es sin duda lo mejor de La Chica del tren, se sumerge en el personaje como una actriz poseída; no hay una pizca de vanidad aquí y mantiene su acento inglés original para representar a una británica que ahora vive en Nueva York. Rachel ha perdido su trabajo y su infiel marido Tom (Justin Theroux) la ha abandonado por Anna (Rebecca Ferguson), quién no perdió el tiempo para embarazarse.
Así es como una amargada Rachel realiza viajes diarios hacia Manhattan para ir a un trabajo de relaciones públicas que ya no tiene, tomando vodka que disfraza en una botella de agua mientras contempla a través de la ventana un hogar suburbano ocupado por la pareja perfecta: la sexy Megan Hipwell (Hayley Bennett) y su agraciado marido Scott (Luke Evans). De pronto Megan aparece golpeada hasta la muerte en los bosques cercanos a su casa de ensueño. ¿Acaso Scott la mató? ¿O tal vez fue Kamal Abdic (Edgar Ramírez), el psicólogo que Rachel vio abrazando a Megan? ¿O tal vez fue la propia Rachel, quien no recuerda por qué despertó esa noche con moretones y con su ropa salpicada de sangre? Un detective local, interpretado por el confiable Allison Janney, quiere saberlo.
Sin mencionar spoilers, la película revela el resultado final mucho antes que la novela. Pero te ayudará a disfrutar la experiencia el dejarte llevar por la obsesiva cadencia del soundtrack de Danny Elfman al tiempo que buscas respuestas en las oscuras sombras de la cinematografía de Charlotte Bruus Christensen. La Chica del tren carece del humor negro y del elegante estilo que el director David Fincher le imprimió a su adaptación de Gone Girl (Perdida, 2014) con la que comparte cierta vibra y es imposible evitar las comparaciones.
Lo que inteligentemente mantiene la película, son los tres narradores de la novela de quienes debemos desconfiar – Rachel, Anna y Megan; mujeres que han sufrido para ser honestas con nosotros y consigo mismas. El secreto que une a estas desafortunadas mujeres es justamente el combustible femenino que convierte a La Chica del tren en una película fascinante.
El elenco esta integrado por Allison Janney, Darren Goldstein, Édgar Ramírez, Emily Blunt, Haley Bennett, Justin Theroux, Laura Prepon, Luke Evans, Rebecca Ferguson.
Avance subtitulado de La Chica del Tren
Imágenes de La Chica del Tren